
16 Feb Retos de la logística B2B y diferencias con la B2C
Para que la logística B2B obtenga resultados totalmente satisfactorios es imprescindible tener en cuenta ciertos aspectos esenciales. En este artículo centraremos la atención en hablar de los retos específicos a los que se enfrenta esta rama logística. Además, citaremos las diferencias entre la logística B2B y B2C.
Logística de empresa a empresa
La logística integral es fundamental en las transacciones comerciales B2B y se distingue por tener asociadas unas características muy marcadas. Por ello, los profesionales del sector debemos tener claros cuáles son los retos a los que nos enfrentaremos. Solo así estaremos en disposición de encontrar los puntos clave para proporcionar siempre un eficiente y satisfactorio resultado a nuestros clientes, en este caso, las empresas. Si no somos capaces de reconocer estos retos específicos, se pueden producir ineficiencias en las operaciones, pérdidas de clientes y un descenso del posicionamiento en el mercado.
Soluciones de logística integrales en transporte entre destinos
Está claro que no todas las provincias brindan la misma facilidad de comunicación o la demanda no es tan alta. Por este motivo, intentar disponer de distintos puntos de almacenamiento de mercancía es crucial. No obstante, también lo es la capacidad de entrega. En ese sentido, contar con un organizado y profesional equipo es básico para que los negocios dispongan de sus artículos cuando los necesiten. Así, el reto de la capilaridad geográfica estará cubierto.
Entregas programadas
La rapidez de los envíos, incluidos los paletizados, es indispensable para mantener la fidelidad de los clientes. En ese sentido, facilitar una fecha exacta e, incluso, horas aproximadas, serán soluciones de logística integrales realmente efectivas para mejorar la organización de la gestión de mercancía.
La importancia de contar con un almacén en la logística B2B
Tanto los fabricantes como los distribuidores han de disponer de un almacén para dar salida a la mercancía cuando sea preciso. De igual modo, podrán tener en reserva ciertos productos para cuando sean necesarios. Así, se pueden hacer pedidos más voluminosos y, por tanto, el ahorro de costes será notable. De hecho, con el fin de conseguir un control de los costes rentable, es muy importante que se analice y mida cada una de las acciones de logística de empresa a empresa que se lleven a cabo.
Otros desafíos tener en cuenta en la logística integral B2B
Existen ciertos retos que deben estar enfocados en:
- Los clientes: aparte de comprender y dejar clara una propuesta de valor, hay que considerar las tendencias de consumo y tecnología.
- Los procesos: debemos emplear métodos ágiles para que los procesos soporten las propuestas de valor fijadas.
- Alianza consolidada entre negocios: con el fin de alcanzar el éxito por ambas partes, es evidente que hay que desarrollar una confianza plena como base. Para lograrlo, buscar nuevos modelos de negocio o utilizar plataformas integradas son opciones muy rentables y óptimas.
- Control total de riesgos: para tener vigilados los puntos críticos de la cadena logística, contar con un monitoreo constante es una gran solución. Por ello, el mundo tecnológico y el informativo quedan convertidos en aspectos estratégicos de gran valor. De igual modo, el mundo digital debe implementar tecnología para analizar información, automatizar procesos y llevar adelante una buena trazabilidad y ciberseguridad.
Diferencias entre la logística B2B y B2C
La logística integral que está orientada a los clientes es diferente en necesidades de la que requiere una estrategia de negocio a negocio. Está claro que en ambos tipos requieren un control de los embalajes, las entregas y los productos. Ahora bien, las condiciones de compra y el proceso a seguir es distinto en B2B y B2C. Por ejemplo, al referirnos a contenidos, en las transacciones B2C encontramos artículos de uso personal y en las B2B los productos suelen ser técnicos.
Para que se entiendan bien las diferencias, citaremos los aspectos más destacados que distinguen ambos tipos:
- Los clientes, en el caso del B2B, están formados por un grupo de personas. En el B2C, únicamente hay un comprador.
- El volumen de pedidos en la logística B2B se basa en proporciones grandes. Por el contrario, un cliente B2C suele comprar cantidades pequeñas.
- Esta cantidad de volumen hace que el precio que se le ofrece a un cliente B2B contenga especificaciones. A la cantidad, como es obvio, también hay que sumarle la frecuencia de compra, ya que será superior que en un cliente particular.
- La relación B2B es más constante, pues, en muchas ocasiones, la B2C es de un solo uso.
En conclusión, la logística B2B tiene que estar preparada para cubrir todas las necesidades de un mercado cada vez más exigente. Por ello, debe centrar la atención en proporcionar el menor coste posible sin rebajar la calidad del servicio. Recordemos que el objetivo es, además de diferenciarse lo más posible de la competencia, ofrecer una experiencia de servicio completamente satisfactoria, basada en una estratégica logística exitosa.
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